¿Qué es diseño biofílico? La tendencia que está marcando la pauta de las nuevas construcciones en Colombia
A nivel mundial, dadas las condiciones actuales que se presentan por el cambio en los contextos sociales, económicos, ambientales y nuevos desarrollos tecnológicos; las personas se han visto obligadas a reorganizar sus actividades, rutinas y formas de trabajo. Con el tiempo esto ha hecho que tomen mayor conciencia sobre la creciente necesidad de conectar con espacios físicos que ofrezcan bienestar, promuevan la salud y confort emocional.
De ahí la importancia del diseño biofílico, un tipo de arquitectura en el que la naturaleza es la protagonista y en donde se mezclan los espacios interiores más modernos y vanguardistas con el verde. Su objetivo es mejorar la relación de las personas con el medio ambiente, promoviendo la responsabilidad ecológica y el desarrollo sostenible.
En la práctica, según estudios realizados para entender el impacto de los diseños biofílicos en las personas, se ha encontrado que éste mejora las funciones cognitivas, incrementa la creatividad, genera una funcionalidad emocional más positiva y potencia la concentración.
Su término, de acuerdo con Rubby Stephanny Gnecco Niño, directora del Programa de Arquitectura de Areandina, sede Valledupar, “tiene raíces en tres disciplinas: la psicología, la biología y la ecología; sin embargo, todas tienen un denominador común: la naturaleza y su impacto en el bienestar emocional, espiritual y físico”.
En el 2006, en el marco de una conferencia en los Estados Unidos, se establecieron las bases de la biofilia para incorporarla al diseño urbano y a la arquitectura. Años después esta tendencia es la protagonista de los diseños orgánicos de los edificios más modernos.
En Colombia, este tipo de arquitectura está en auge; de hecho, hoy está presente en al menos el 25 de los nuevos proyectos de edificios corporativos; asimismo, es el protagonista de los espacios urbanos más modernos, que incorporan componentes naturales y zonas verdes que contribuyen al cuidado del planeta y reducen la contaminación.
“Una de las construcciones más icónicas que cuentan con un diseño biofílico es el Edificio Santalaia, en la capital del país, el cual tiene una de las fachadas verdes más grandes de Latinoamérica, que recicla el agua, produce oxígeno y elimina gases nocivos; igualmente, se destaca el Edificio Ecotek, también en la ciudad, que cuenta con fachadas que permiten regular el clima, aprovechar las aguas lluvia y sobresale por su estética gracias a su diseño bioclimático. A la par, están los jardines botánicos de Medellín y Bogotá, espacios creados para la conservación y la educación sobre la naturaleza; y el Centro Argos, en la capital de Antioquía, que resalta por el aprovechamiento que hace de la luz natural, la disminución en el uso de la energía, sus áreas verdes y el manejo de materiales reciclados”, afirma Gnecco.
Con relación a lo que se prevé en este tipo de arquitectura en el país, el diseño biofílico se proyecta como el mayor generador de soluciones de edificios y nuevos espacios urbanísticos que permitan que la naturaleza esté presente en todas partes, a nivel interno y externo de los edificios y en todas las escalas, para frenar o mitigar el deterioro del medio ambiente y de la biodiversidad. Al mismo tiempo, serán construcciones que responderán a los retos que tienen las ciudades en materia de gestión de recursos como el agua, la energía, los alimentos y las materias primas, entre otros.
Igualmente, “el uso de la arquitectura biofílica ayudará a reducir los costos de uso de la luz eléctrica al incorporar estrategias de diseño bioclimático que ayuden a regular los ambientes externos e internos de los edificios con vegetación y agua. Por otro lado, mejorará la calidad de vida, reducirá las enfermedades urbanas y finalmente mejorará el potencial de desarrollo de las ciudades y los territorios.
En conclusión, dice Gnecco, “este modelo, apoyado en una mejor articulación con la tecnología, permitirá la creación de diseños regenerativos y sostenibles, que permitirán una mayor y más rápida adaptación al cambio climático, priorizando el bienestar de los seres humanos”.